León, Guanajuato a 03 de diciembre de 2025.- Charlan la curtiduría desde de las ciencias de la salud, las ingenierías y las ciencias sociales y humanidades en el 5° Foro Voces de la Ciencia, realizado por el Campus León en la Universidad de Guanajuato (UG).
Esta actividad, de gran relevancia regional e histórica, especialmente para la ciudad de León, generó un espacio de diálogo que permitió acercar a la comunidad universitaria al trabajo de las y los investigadores del campus bajo enfoques multidisciplinarios.
Para ello, se contó con la presencia de la Dra. María Áurea Valerdi González; profesora-investigadora y actual Directora del Departamento de Estudios Sociales en la División de Ciencias Sociales y Humanidades del Campus León; de la misma división, participó el Dr. Juan Antonio Rodríguez González.
En representación de la División de Ciencias e Ingenierías (DCI), participó el Ingeniero Químico y actual Coordinador del Programa de Técnico Superior Universitario (TSU) en Curtiduría, Mtro. Juan Francisco Rayas Rojas de esta misma entidad. Fungió como moderadora la Dra. Susana Figueroa Gerstenmaier, profesora- investigadora del Departamento de Ingeniería Química, Electrónica y Biomédica.
A su vez, asistió el Ing. Armando Guevara Rubalcava, Presidente Ejecutivo de la Cámara de la Industria de Curtiduría del Estado de Guanajuato (CICUR) y la Cámara Nacional de la Industria de la Curtiduría (CANALCUR).
En sus participaciones, la Dra. María Aurea Valerdi González destacó que este tipo de foros son una gran oportunidad para compartir saberes desde distintas disciplinas, al subrayar la importancia de mostrar el trabajo que se realiza desde las ciencias sociales y humanidades, específicamente en la sociología del trabajo y, en su caso particular, el estudio del trabajo de las mujeres en esta industria.
Por su parte, el Ingeniero Guevara analizó la curtiduría como una industria fundamentalmente de reciclaje, al recalcar que si esta no existiera, los cueros crudos (se comercializan al año mundialmente a un ritmo de cerca de 234 millones de cueros) se enterrarían o quemarían, generando grandes focos de infección. Asimismo, aclaró enfáticamente que la curtiduría aprovecha el cuero como subproducto o residuo de la industria cárnica.
El Dr. Juan Antonio Rodríguez González compartió los hallazgos de un proyecto sobre la cultura empresarial para este sector. Explicó que existen empresas vinculadas a la economía global y circular, las cuales apuestan por el reciclaje y la reutilización; al estar certificadas y cumplir con las normas, generan una mayor cantidad de empleos. En contraste, señaló que aún persiste una amplia mayoría de microempresas que consideran la certificación, así como el cuidado del agua y del medio ambiente, como un gasto.
El Mtro. Juan Francisco Rayas Rojas, quien proviene de una familia dedicada a la curtiduría, destacó que la ciencia aplicada al sector ha sido históricamente desatendida. Señaló que la UG debe asumir un papel protagónico para impulsar que la industria avance hacia un reciclaje integral, no solo del cuero, sino también de sus residuos. Añadió que la incorporación exitosa de profesionistas formados en el TSU en Curtiduría ofertado por la UG representa un logro significativo para el desarrollo del sector.
En cuanto al consumo de agua para esta industria, el Ing. Armando Guevara Rubalcava señaló, ante una preocupación social, que la industria curtidora consume solo el 4 por ciento de la extracción de agua potable que realiza el Sistema de Agua Potable y Alcantarillado de León. Explicó que el promedio de uso de agua en León es de 12 litros por kilográmo de cuero procesado, mientras que el promedio mundial es de 18 a 20 litros, además de que el uso de agua tratada es visto por los curtidores como una cuestión de supervivencia; si la calidad fuera mala, echaría a perder los cueros, agregó.
Asimismo, se abordaron temas relacionados con las condiciones de trabajo en la curtiduría, al tratarse de un proceso demandante que implica la manipulación de químicos, así como a una creciente apropiación de mujeres en una actividad que ha estado históricamente masculinizada y cómo sus aportaciones han fortalecido a la misma. Al respecto, el Mtro. Rayas destacó que una estudiante del TSU en Curtiduría fue quien obtuvo el mejor promedio de su generación.
Por su parte, la Dra. Valerdi enfatizó la necesidad de contemplar el trabajo productivo y de cuidado que realizan las mujeres dentro de esta industria. Asimismo, se recalcó a la SICUR como la única institución a nivel nacional que cuenta con un Parque Integral de Manejo de Residuos enfocado en el tratamiento de los lodos generados por la industria.
En cuanto a ello, el Mtro. Rayas recordó que se han realizado proyectos con la UG para el tratamiento de los descarnes sulfurados (residuos cárnicos) con el fin de depurar grasas y proteínas (para productos como gelatina o jabón; sin embargo, este proyecto se detuvo temporalmente por financiamiento y cambios en la comercialización de cueros predescarnados.
Se cerró la sesión abordando la importancia de la sustentabilidad de la piel, por lo que se recalcó los productos de cuero, al ser subproductos de la carne, son mucho menos contaminantes que los productos sintéticos, derivados del petróleo. Además, la durabilidad de los productos de piel permite que sean heredados de generación en generación.
Es así como se cerró la última sesión del año 2025, esperando contar con más herramientas y estrategias para compartir, con la comunidad universitaria y público en general, el trabajo colaborativo y de investigación que realiza el profesorado del Campus León.
