dr carlos alanias

Carlos Alanías Rodríguez Rico
Departamento de Astronomía,
División de Ciencias Naturales y Exactas,
Campus Guanajuato,
Universidad de Guanajuato

Durante muchos años el ser humano ha realizado una gran cantidad de misiones espaciales con objetivos muy variados. En los primeros años de la exploración espacial el principal reto era escapar del campo gravitacional de la Tierra y aterrizar exitosamente en la Tierra, después de cumplir con una serie de metas bien definidas. Entre las misiones más famosas se encuentra la misión de exploración de la Luna y regresar a los astronautas sanos y salvos. La exploración planetaria ha incluido el acercamiento a planetas como Júpiter, Saturno, Urano, Neptuno por el Voyager 2. Otra misión conocida como New Horizons se acercó en 2015 a Plutón e incluso a otro objeto que pertenece al cinturón de Kuiper. Pero ¿cuáles objetivos científicos son los que se persigue con tantas misiones espaciales? A la distancia a la cual han podido acercarse las sondas espaciales, además de obtener imágenes increíbles de los diferentes planetas y satélites naturales, por ejemplo, se pueden realizar estudios sobre la geología, morfología, composición de la superficie y análisis de la atmósfera.

Dado que Marte es el planeta más cercano a la Tierra se han enviado alrededor de cuarenta misiones espaciales con el objetivo de estudiarlo y así conocer más sobre su atmósfera y algunas de estas misiones han logrado llegar a la superficie. Todas estas misiones nos han permitido conocer mucho sobre el famoso planeta rojo. Recientemente China, Emiratos Árabes y Estados Unidos han enviado misiones a Marte, incrementando los competidores en la carrera espacial. Se han obtenido imágenes espectaculares del planeta vecino, una de esas misiones está en órbita alrededor del planeta rojo con el objetivo de bajar a la superficie y una que ya está realizando la exploración, el Perseverance.

Pero los planetas no son los únicos objetos celestes del Sistema Solar que son de interés para el ser humano. También los asteroides han sido el objetivo en algunas misiones espaciales. El Hayabusa enviado por Japón, fue una misión espacial no tripulada y tuvo como meta obtener muestras del asteroide Itokawa en 2005 y regresó a la Tierra con las muestras tomadas de este asteroide en 2010. No conocemos demasiado sobre la composición de los asteroides en general y la importancia de este tipo de misiones es justamente esa. Dado el éxito de la primera misión se envió el Hayabusa 2 y llegó al asteroide Ryugu a mediados del 2018, regresando a la Tierra a finales del año pasado. Esta misión recogió muestras y además varios rovers exploraron la superficie del asteroide con la finalidad de estudiar el contexto geológico de donde se obtuvieron dichas muestras. La importancia de recopilar muestras de este tipo de asteroides es que podremos estudiar material que está prácticamente intacto desde la creación del Sistema Solar y nos permitiría tener información sobre la formación de los planetas y sobre el origen de la vida en la Tierra. El envío de este tipo de misiones no tripuladas permite avanzar en el desarrollo tecnológico relacionado con navegación, guiado y los sistemas de control. La misión no terminó ahí, la nave que quedó en el espacio con combustible para realizar otras misiones en el 2026 y 2031, así que esperemos más noticias sobre esta misión en unos años.

Los Estados Unidos de América envió una misión al asteroide Bennu y llegó a la superficie de este en 2018 también con el objetivo de recoger muestras de su superficie además de cartografiarlo y analizarlo. Estudiar a los asteroides es importante también ya que existe la posibilidad de que algún asteroide se estrelle contra la Tierra en un futuro y mitigar el efecto que pueda causar depende de los resultados de estas misiones.

Los cometas son otro tipo de objetos que han sido objeto de misiones espaciales. El cometa 9P/Temple 1 fue visitado por la misión Deep Impact de E.E.U.U. y sus metas científicas fueron: mejorar el conocimiento de las características físicas del núcleo del cometa, determinar las propiedades de las capas superficiales como la densidad, dureza, porosidad y composición, estudiar la relación entre las capas superficiales y el núcleo, así como el estudio de algunos materiales primigenios del Sistema Solar que puedan estar en el cometa.

El Sol también es estudiado por misiones espaciales como la Parker Solar Probe enviada por los Estados Unidos de América en 2018 y la intención es acercarse lo suficiente al Sol y estudiar su atmósfera, en particular la corona solar. El objetivo es comprender el origen y evolución del viento solar. El estudio del Sol de esta manera nos permitirá conocer mejor el clima espacial que finalmente tiene una relación directa con los fenómenos que ocurren en nuestro planeta y que puede afectar la vida y la tecnología terrestre.

Como podemos ver la carrera espacial no incluye solamente la visita del planeta rojo, hay muchos objetos del Sistema Solar que son estudiados año tras año y de los cuales podemos obtener información valiosa sobre nuestro origen, el presente y el futuro de la humanidad. Te recomiendo visitar las páginas oficiales de las tan variadas misiones espaciales realizadas por muchos países durante las últimas décadas, son muy interesantes y los resultados obtenidos por cada una de ellas son realmente asombrosos.

 

Fecha de publicación: 26 de abril de 2021.

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