Dra. Elizabeth Guzmán Ortíz

Departamento de Enfermería y Obstetricia

División de Ciencias de la Salud e Ingenierías

Campus Celaya-Salvatierra, Universidad de Guanajuato 

 
 
 
 

Como se sabe la lactancia materna proporciona una diversidad de beneficios para la salud de la madre y el hijo. Si se continua con la lactancia materna, el niño tendrá menos riesgo de enfermarse, debido que se fortalece su sistema inmunológico, que le ayuda a evitar contraer enfermedades infecciosas en el estómago, en el oído y, principalmente en las vías respiratorias. A la mamá puede protegerle de enfermedades crónicas, es decir, que si la madre continua con la lactancia materna puede disminuir el riesgo de contraer cáncer de mama, cáncer de ovario, diabetes y presión alta. Si bien, se recomienda amantar al bebé de manera exclusiva hasta los 6 meses y a partir de los 6 meses puede iniciar con la combinación de alimentos sólidos y leche materna, hasta los dos años, pero por diversas circunstancias la madre y el bebé deciden dejar de amamantar, entonces se inicia con el destete.

Iniciar el destete implica una decisión libre de la madre y el bebé. Así como existen señales de que el bebé está lleno o tiene hambre, también existen señales del bebé para dejar de amantar, sin embargo, estas señales son diferentes en cada niño. Las principales señales son cuando el bebé muestra desinterés por amamantar, es decir que se inclina más por comer alimentos sólidos y rechaza el pecho. Otra señal es cuando el bebé comienza a espaciar las tomas, por ejemplo, si pedía el pecho cada 6 horas, posiblemente lo haga una por la mañana y otra por la nochey suele dormir durante la noche sin pedir el pecho. Algunos niños tienden a morder o jalar el pezón o jugar mientras están comiendo. También piden el pecho solo para sentirse seguros o cuando están irritables, pero solo succionan y no comen.

La percepción de las señales para dejar de detestar es individualizada y se requiere atención y comunicación entre madre y su hijo para tomar la decisión de dejar de amamantar. Una vez que se decide iniciar el destete se comparte los siguientes consejos para llevar un deteste gradual y respetuoso.

Dejar de amantar al bebé de un solo golpe puede ser doloroso tanto emocional como físicicamente para la madre y el bebé. Se recomienda llevar un deteste gradual, ir reduciendo poco a poco la frecuencia de las tomas; a medida que disminuya las tomas el cuerpo dejará lentamente de producir leche. También se puede apoyar de extracción de leche y dar al hijo en vasito y así evitar la succión del pecho. Eliminar tomas a la semana, puede iniciar con una a la semana y después dos a semana y así sucesivamente hasta llegar a una toma por día, así se evitará problemas de congestión mamaria o infecciones en los pechos.

Ofrecer juegos u otras actividades como leer un libro, interactuar con el papá, esto permite distraer al niño y se olvide de poco a poco del pecho. También puede realizar cambios en la rutina con el bebé, por ejemplo, si por las noches se acostumbra a acostar al niño con el pecho, o la hora despertarse pide el pecho, entonces el padre juega un rol importante en este cambio de rutina. Incluso el padre, puede ofrecer consuelo y fomentar la cercanía y el vínculo.

 
 

Fecha de publicación: 10 de octubre de 2024.